Alberto Gamero es un técnico malicioso. Llena el medio campo de volantes de contención, deja casi unidas la defensa y el medio campo y aprovecha la velocidad de Marco Pérez. Con ese esquema le repitió, por segundo año consecutivo, la dosis al Nacional y lo venció dos a uno en el Atanasio Girardot.
El año pasado, lo mismo. Tolima se defendió con siete y ocho jugadores y en dos jugadas de contraataque marcó ante los verdes, para posteriormente desde el punto de los doce pasos vencer en los penales y coronarse campeón en el Atanasio.
La clave parece estar en quitarle el balón a Nacional y congestionar las áreas, como lo reconoció en la rueda de prensa el propio Alberto Gamero. “Terminamos el partido defendiéndonos, porque a veces hay que defenderse, y obligamos al Nacional a pelotiar…les neutralizamos el partido… porque nosotros vimos los partidos contra Junior y contra Patriotas y siempre Nacional quiere salir dominando el balón, ese es su estilo de juego y nosotros se lo controlamos”, dijo.
Y ese control dio resultado. Nacional comenzó ganando gracias a un buen tanto de Vladimir Hernández al minuto 16. Solo dos minutos después, el juez, Gustavo Murillo, sancionó una aparente mano del capitán Alexis Henríquez y allí llegó Marco Pérez para convertir el gol número 73 en su historia con el Tolima.
Los 15 minutos iniciales del segundo tiempo fueron para los pijaos, que pudieron aumentar el marcador con el propio Pérez, pero a partir de ese minuto Nacional recuperó su juego y cuando parecía que los verdes podían dar vuelta al marcador, un pase de Rafael Carrascal llegó a la cabeza de Maicol Balanta para el 2 a 1.
En ese momento, al igual que al estadio, al Nacional se le fueron las luces. Más cuando Alberto Gamero ingresó a un defensa y a otro medio campista de contención y así cerró cualquier opción para los verdes, que fueron incapaces de vencer a una defensa de once jugadores.
Con el triunfo del Tolima y el de Junior como visitante en la sultana del Valle, el cuadrangular B dejó a los pijaos y los tiburones como líderes con 4 puntos. Detrás quedaron Nacional y el Cali con un punto.
Este domingo, a las 5 de la tarde, Nacional recibirá al Cali, en el duelo de coleros que ninguno de los dos equipos puede perder, si quiere llegar a la final de la Liga Águila 1 del 2019.