El 13 de marzo de 2024 un abusador sexual del barrio El Picacho, al noroccidente de Medellín, fue perseguido por la comunidad que buscaba hacer justicia por mano propia ante la violencia sexual, continua, contra una niña de 11 años.

Esa noche, la propia comunidad golpeó con palos y piedras al abusador sexual del barrio El Picacho, mientras que este hombre era defendido por su “esposa”, quien era la madre de la niña.

¿Por qué la mujer defendía al abusador sexual del barrio El Picacho?

Ante la actitud agresiva de la comunidad del barrio El Picacho, fue el propio Esmad el único capaz de sacar a la pareja de su vivienda.

Aunque la mujer dijo que todo era “un chisme”, una familiar de ella, Marcela Ruiz, pidió un examen de la niña y su resultado posterior fue claro, la niña había sido abusada

Inmediatamente se activó una denuncia por abuso sexual, pero ya la pareja había escapado hacia el suroeste de Antioquia. El hombre porque decía ser inocente y su “mujer” resaltando que “era la niña la que se le insinuaba al hombre”

¿Cómo capturaron al abusador sexual del barrio El Picacho?

Pero, gracias a Dios, y a un aviso de la comunidad, el abusador sexual del barrio El Picacho fue capturado.

“…Durante 15 días adelantamos actividades de investigación que nos permitieron recolectar elementos de prueba para judicializar y capturar un hombre, por el delito de acceso carnal violento y actos sexuales con menor de 14 años, en el distrito de Medellín.

Es así como investigadores de la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, se desplazaron hasta el municipio de Fredonia – Antioquia, donde se estaba ocultando un hombre de 35 años quien sería el responsable del abuso sexual de una menor de 11 años, en el barrio Picacho el mes de marzo, donde fue agredido por ciudadanos del sector que lo sorprendieron”, señala el boletín de prensa oficial de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.

En el desarrollo de la investigación, se conoció que esta persona presuntamente realizaba esta conducta desde que la menor tenía 10 años.

Así mismo, se continua con la investigación para determinar la responsabilidad de la madre de la menor, con el fin de establecer si la conducta se materializó con el consentimiento de esta. 

La menor de edad fue acompañada hasta la comisaria de familia, donde se le restablecieron sus derechos y actualmente se encuentra en custodia de una familiar que cumplió con los requisitos exigidos para hacerse cargo de ella.