Carlos Mario Romero se convirtió en alumno aventajado de Daniel Quintero Calle, a quien en Medellín se llama el nuevo samuel moreno.
Y es que, a Carlos Mario Romero, a quien llaman el mocho romero, lo están buscando en el Concejo de Medellín, donde estuvo hasta el 31 de diciembre del año 2023, para que devuelva un celular IPhone 13, que en el mercado vale, en promedio y en su modelo de mejor memoria, 5.449.000 pesos (cinco millones cuatrocientos cuarenta y nueve mil pesos).
La denuncia sobre el ex concejal Carlos Mario Romero la hace el líder de San Antonio de Prado Daniel Esteban Salazar @DanielESalazarH y también cubre al ex concejal Luis Bernardo Vélez, a su vez deudor de un celular IPhone 14, que vale 6’200.000 pesos (seis millones doscientos mil pesos).
“…Alguien que busque al ex concejal de @QuinteroCalle para que devuelva el IPhone que le dieron en el @ConcejoMedellin con el dinero de los impuestos que pagamos los ciudadanos
“@TobonVillada con la idea de austeridad que se plantea desde la administración de @ficogutierrez que cada concejal tenga su celular a título personal”, señala en sus redes sociales.
¿Qué piensan los ciudadanos de Medellín sobre los concejales?
Las respuestas de los ciudadanos dejan ver el cansancio de los habitantes de Medellín con todo tipo de delincuentes que llegan a las corporaciones públicas pidiendo carro nuevo, celular nuevo y oficina nueva, y después olvidan devolverlos:
March @smartysofi: “es que es el problema con funcionarios que creen que llegan a cargos importantes y tiene derecho a todo y hasta más. Básico es saber que los equipos de trabajo no son un regalo. Son para que se puedan desarrollar funciones del cargo. Pero este tipo de gente qué va a saber”.
Edgar Pulgarín @eopa1981 “No más celulares, camionetas, gasolina, viajes, eso lo pagan con impuestos que yo pago y que todos pagan, qué cada acción popular hay que interponer para que estos señores no le vuelvan dar nada y como todo ciudadano eso lo paguen con su salario que no es el mínimo”.
Checo Verdolaga @asesoriassvo “ya debe estar desarmado en el Opera”.
