Diana Osorio, como cualquier mamá del mundo, está dispuesta a dar por un hijo hasta su vida, si fuera necesario.

Este martes y durante más de diez horas, especialistas del Hospital Pablo Tobón Uribe realizaron un trasplante de hígado de Diana Osorio a su hija Aleia.

La bebé, de solo cinco meses, requiere ese procedimiento médico para no seguir poniendo en riesgo su vida.

“Es un proceso con la mamá que tiene más garantías de que todo salga bien y el cuerpo no rechace el trasplante. Es una bebé muy pequeña a la que sería difícil aplicarle todos los medicamentos para que el organismo acepte a su nuevo “huésped”, explicó a www.rutanoticias.co Carlos Ignacio Cuervo Valencia, el ex ministro de salud que es experto en el tema.

“Se hace con la mamá para que exista más histocompatibilidad, es decir mas identidad inmunológica entre los tejidos de la donante y los de la bebé”, explicó Cuervo Valencia.

Agregó que el hígado es un órgano “laboratorio” y que al igual que el riñón permite liberar tóxicas del cuerpo, a la vez que al ser “injertado” en la bebé puede desarrollarse y ayudarle a crecer sana.

Esta noche de martes, Diana Osorio, la esposa del Alcalde Daniel Quintero, escribió en sus redes sociales que esperaba que el trasplante salvara a su hija, pero que también ponía la vida de la pequeña en manos de Dios. 

«A veces intentamos interferir en el flujo natural que el universo diseñó para nosotros y entender a una inteligencia que va más allá de nuestros límites humanos. Hoy estoy entregada a la paz y a la confianza en dejarle la vida de mi hija a Dios y a sus oraciones», escribió.