El Contralor Felipe Córdoba pareció rendirse ante los empresarios del gas y perjudicar a Colombia con sus advertencias y conceptos.
Critica en la “Crónica de Gardeazábal” al Contralor Felipe Córdoba y sus particulares acciones:
“EL CONTRALOR TAMBIÉN LEVANTA BARRICADAS
La semana pasada el país centroandino se vio sometido a un racionamiento fuerte de gas natural para vehículos e industrias y hasta se habló de que podría llegar a decretarse para los hogares.
Por supuesto como esos temas no se pueden tratar con la verdad, el detalle de lo sucedido apenas se filtró.
Resulta que todo comenzó porque se presentó un derrumbe en la via que comunica a Yopal con Aguazul afectando el gasoducto que alimenta La Belleza, el que trae el gas natural desde Cusiana hasta el centro de Colombia.
Ante semejante emergencia y como no podía bombearse gas natural hasta que no se reparara el daño en el sitio del derrumbe, se decidió aprovechar para hacer paralelamente un trabajo pendiente en una válvula da la red de Cusiana, reemplazando la actual por otra.
Parece que calcularon mal los tiempos y la solución se ha prolongado dejando un hueco que hace otro daño a la economía del país.
Obviamente si Canacol y unos mandamases de la Costa no se hubiesen opuesto a montar la Regasificadora en Buenaventura y a la construcción del pequeño tramo de gasoducto a Yumbo, esta crisis no se habría presentado.
¿Podría estar Colombia ante otra crisis en distribución del gas?
Empero, todo esto se agrava a futuro porque hace unas semanas no más el señor Contralor Felipe Córdoba se doblegó ante los criterios de los opositores a la Regasificadora y, usando populísticamente los poderes que ahora tiene, le dijo al gobierno que esa solución no podía permitirse porque la financiación correría por cuenta de los usuarios del gas.
Es decir, entró en la moda de las trincheras, puso el obstáculo, pero no propuso la salida, que debe haberla por algún lado.
Ante la amenaza de otra guerra terrorista como la que vivimos antaño o de fenómenos climáticos y del secamiento de ríos y de pozos petroleros, el país necesita una permanente reserva alterna como la que brinda la Regasificadora de Buenaventura que importaría el gas barato de Bolivia o Perú.
Nadie sale empero a frentear al Contralor. Y en el Valle, el más perjudicado a la larga en esta crisis, porque paga el gas más caro del país, no hay liderazgo para enfrentarse a la multinacional Canacol o a la rosca de costeños que maneja el Ministerio de Minas y Energía. Queda solo la esperanza que el Contralor, que es de Pereira, donde también se sufren las consecuencias, recapacite y en vez de montar otra barricada, señale el camino para evitar crisis futuras más graves que las de hoy.
El Porce, septiembre 6 del 2021