Tras meses de expectativa y especulación en redes sociales, el nuevo club de la capital —antes Club Deportivo La Equidad— confirmó oficialmente su nuevo nombre: Internacional de Bogotá.
El cambio de identidad, incluido el nombre, fue un requerimiento de los anteriores dueños del club. Pero lejos de ser un simple ajuste administrativo, abrió la puerta para crear una marca profundamente bogotana: un club de nueva generación que pone a la comunidad en el centro, se impulsa desde la cultura, se respalda en la ciudad y refleja a las múltiples comunidades y acentos que hacen única a Bogotá.
Internacional de Bogotá Fútbol Club nace como una declaración de lo que hoy representa la capital: una ciudad viva, diversa, resiliente y en constante movimiento. “Bogotá es nuestra raíz: capital de los acentos y de los sueños de colombianos de todo el país. Con Bogotá en nuestro nombre, abrazamos esta diversidad como nuestra mayor fortaleza”.
De esta manera, el club se suma a la evolución del fútbol moderno: Internacional de Bogotá adopta una identidad alineada con las grandes capitales del mundo, donde distintos clubes comparten el nombre de su ciudad como emblema de orgullo y pertenencia. Así ocurre en lugares con clubes de Milán, Madrid, Manchester y París, entre otros, donde el nombre de la ciudad es compartido por varios equipos que la representan desde distintas historias y comunidades. Los colores: blanco, negro y dorado La identidad visual del club se construye a partir de los símbolos de la ciudad. El blanco representa unión; el negro, la fuerza y resiliencia de Bogotá; y el dorado, la grandeza asociada al mito de El Dorado.
En Inter Bogotá, estos símbolos no son decorativos: son un compromiso. El club desarrollará programas de conservación y regeneración de los Cerros Orientales, y acciones para proteger, fomentar la reproducción y asegurar el futuro del cóndor andino, un animal en vía de extinción y símbolo nacional de Colombia.
Un liderazgo con visión global El proyecto está encabezado por Al Tylis y Sam Porter, empresarios con amplia trayectoria en la transformación de organizaciones deportivas en Estados Unidos, Europa y Latinoamérica. Ambos son directivos de Apollo Sports Capital, el brazo deportivo de Apollo Global Management, que recientemente ha liderado acuerdos de alto impacto en clubes de escala global.
A este liderazgo se suman figuras internacionales que actúan como inversionistas y embajadores del proyecto: Ryan Reynolds, Rob McElhenney, Eva Longoria, Kate Upton, Justin Verlander, Scott Galloway y Óscar Dos Santos, entre otros.


