Juan Carlos Rodríguez, asesino de la niña Sarita Vargas, aceptó en una audiencia su responsabilidad en la muerte de la menor, quien solo tenía 11 años de edad.
El pasado 25 de diciembre de 2024, Sarita Vargas tras discutir con sus padres salió de su vivienda en Sogamoso, Boyacá. Su demora en regresar llevó a la denuncia de su desaparición, ante lo cual se interrogó a los familiares, incluido Juan Carlos Rodríguez, pero ninguno aceptó saber el destino de la menor.
Finalmente, las autoridades hallaron su cuerpo el 12 de enero de 2025 en una zona rural a dos kilómetros de su vivienda.
El 17 de enero, Juan Carlos Rodríguez, asesino de la niña Sarita Vargas, sería capturado y señalado de “desaparición forzada”. Sin embargo, este 15 de febrero el procesado, al llegar a la audiencia de imputación de cargos, y ante las pruebas aportadas por la Fiscalía, aceptó ser responsable de la muerte de la niña.
«Se encontró con ella en un sector conocido como Vanegas y a bordo de una motocicleta la llevó a la vereda El Coral, donde le habría causado la muerte de forma violenta y posteriormente abandonado el cuerpo en una zona boscosa», señala el expediente de la Fiscalía de Colombia que llevó a su confesión.
Ahora, será acusado de feminicidio agravado, delito que podría darle hasta 50 años de cárcel.
Sin embargo, la investigación también apunta a nuevas pruebas sobre la participación de otra persona en la desaparición y muerte de la niña, según las autoridades.
“Durante la diligencia, un fiscal de la Seccional Boyacá amplió la imputación en contra del procesado y le adicionó el delito de feminicidio agravado, en atención a las nuevas evidencias y elementos materiales probatorios obtenidos”, señala el boletín de prensa de la Fiscalía de Colombia.