Fernando Gaitán sacó de su cerebro dos de las más grandes telenovelas escritas en Colombia: Yo Soy Betty la Fea y Café con Aroma de Mujer. Obras en las que el amor triunfaba sobre todas las dificultades.
Desgraciadamente, Fernando Gaitán, quien dominaba el amor en sus obras, murió cuando el corazón no le obedeció más y, de un infarto fulminante, terminó con su vida.
Según la prensa bogotana, Fernando Gaitán fue llevado de urgencia a la clínica del Country, afectado por un ataque cardiaco. A la 1 y 46 de la tarde el centro médico informó de su muerte.
Con Café con Aroma de Mujer (emitida entre los años 1994 y 1995), Fernando Gaitán recreó la idiosincrasia nacional alrededor del principal producto agrícola del país, en medio de la tradicional historia entre el rico y la pobre, esta vez representados por la recolectora de café y el dueño de la finca. Todo en medio del humor y la belleza del paisaje colombiano.
Cuatro años después, desde 1999, vendría un éxito superior. Yo Soy Betty la Fea, que alrededor nuevamente del amor entre rico y la pobre (el dueño de la empresa confeccionista y su fea secretaria) se convirtió en la historia televisiva más vista en Colombia, tanto que su desenlace sólo se produjo promediando el año 2001.
Después, a Fernando Gaitán el mundo le reconocería su genialidad. Betty, la historia de amor y su cuartel de las feas, se convirtieron en la historia más contada en las pantallas del mundo: fue emitida en más de 100 países y traducida a 15 idiomas, incluido el chino mandarín, además de contar con 22 adaptaciones en cadenas televisivas del mundo. Esa telenovela tiene, hasta hoy, el récord Guinness por su repetición alrededor del mundo.
La historia de Fernando Gaitán, en la vida real, terminó este martes 29 de enero, a sus 58 años de edad.