Fitch Ratings baja calificación de EPM de BBB a BBB- con perspectiva negativa, lo que afecta la credibilidad financiera de la entidad ante organismos mundiales y ante la banca nacional y extranjera.
Esta baja de la calificación de EPM la justifica Fitch Ratings por la injerencia del Alcalde de Medellín en las decisiones gerenciales de la empresa que llevaron a la renuncia de la Junta Directiva.
Este martes, la junta directiva de EPM renunció argumentando que el presidente de la Junta, el Alcalde Daniel Quintero, tomaba decisiones sin consultarlos
También, sin argumentos claros sobre los fines de esas decisiones.
Cuando Fitch Ratings baja la calificación de EPM envía una señal de que la entidad o no tiene buenas prácticas gerenciales o está perdiendo capacidad de gestión.
Esta decisión de la calificadora parece la primera respuesta a la toma de Empresas Públicas de Medellín por un gerente y un presidente de Junta Directiva convertidos en verdaderos “negociantes”.
En un comunicado público, la calificadora internacional considera que las acciones hostiles del gerente Álvaro Guillermo Rendón, famoso por gerenciar Coomunicipios días antes de su quiebra, y el alcalde Daniel Quintero, son contrarias al Acuerdo de Gobernabilidad suscrito el 23 de abril de 2007 entre la Alcaldía y la administración de Empresas Públicas de Medellín.
En ese documento, se acordaba respetar la autonomía de la compañía como empresa industrial y comercial del Estado y actuar exclusivamente a través de su Junta Directiva.
La perdida de calificación de EPM llega en momentos en se anuncian nuevos nombres para integrar la junta de EPM, que más parece una jauría de interesados que de empresarios pensando en hacer crecer la empresa.