Jericó continuará en alerta roja, según el gobierno departamental, hasta tanto un grupo de geólogos determine en qué condiciones se encuentra el cerro de las nubes y el área cercana de la vereda los aguacates.

El estudio es necesario para conocer las condiciones que generaron la emergencia este domingo en la noche y lunes en la madrugada, que dejó 1000 personas desplazadas y 17 barrios y sectores de Jericó afectados, con unas cien viviendas cubiertas en mayor o menor grado con barro, árboles y rocas.

De las familias de damnificados, unas 800 personas regresaron a sus viviendas o pasaron la noche en casa de familiares, mientras que las otras doscientas están en “el seminario” de Jericó, donde reciben alimentos y ayuda de las autoridades.

La emergencia se presentó en la misma zona que ya vivió dos tragedias parecidas, en los años 50 y 80, en aquellos momentos la cifra de víctimas fue de seis personas.

Todo se inició por las fuertes lluvias en la zona del cerro de las cruces y el desbordamiento de la quebrada los aguacates en la madrugada del lunes. “Nos activaron una alerta de unas fuertes lluvias que no paraban… y un movimiento en masa en los sectores del cerro Las Nubes y la vereda los aguacates”, dijo a los medios de comunicación la directora del Dapard, Juliana Palacio Bermúdez.

El estudio de los geólogos contratados, por la Gobernación y Corantioquia, es necesario ante la presencia de por lo menos 4 fisuras en el cerro de las nubes, en momentos en que las lluvias no cesan, lo que podría ser el inicio de una tragedia mayor.