La hinchada del Medellín sufre cada partido más allá de lo necesario y si antes era común hacerlo, ahora parece obligatorio.

Este miércoles, ante Boyacá Chicó, un equipo muy chico, el Medellín mostró que no tiene liderazgo en el medio campo, que jugadores claves están en un nivel muy bajo y que, aunque tiene buena plantilla, falta mucho para que se llame “equipo”.

Además, que los delanteros aun no “afinan” y de ahí la seguidilla de pases malos y de goles desperdiciados, que tanto ayudarían a mostrar otro DIM.

Cierto, se ganó uno a cero y se sumaron tres puntos en la tabla general, tan necesarios después de tres empates consecutivos, pero falta mucho y si un equipo chico enreda al Medellín, que podría esperarse en un partido ante los grandes de la Liga BetPlay Dimayor.

Además, el equipo debe mostrar la fortaleza del primer torneo y así ayudar a quitar de la cabeza de la hinchada del Medellín que los últimos 5 minutos de cada partido son catastróficos, como se sintió este miércoles (quizá recordando que Millonarios le empató en el minuto 49 del segundo tiempo el primer juego de la Liga).

¿Qué sigue en la Liga BetPlay y la Sudamericana para el DIM?

Con el triunfo el Medellín asume la séptima posición de la Liga BetPlay Dimayor 2 de 2024, a tres puntos de los lideres Once Caldas (que lleva tres partidos jugados y tres victorias), La Equidad (cuatro partidos jugados) y Nacional (con 5 partidos disputados).

En su próximo juego, el Medellín visitará al Deportivo Cali, en juego que se cumplirá este domingo 4 de agosto, a las 7 y 50 de la noche.

Después, visitará a Santa Fe el domingo siguiente (11 de agosto) y deberá estar en Chile, el 14 del mismo mes, para jugar ante Palestino por la Copa Conmebol Sudamericana.

Desgraciadamente la maratón que vive el DIM no deja mucho espacio para reforzar estrategias, pero el cuerpo técnico también debe entender que no solo pierde la hinchada del Medellín y que hay plantilla para jugar diferente y para llamarse “equipo de fútbol”.