La pandemia avanza en Colombia, mientras el gobierno desconoce las decisiones de los jueces.
Y la pandemia avanza en Colombia como lo demuestran los 37 mil muertos por el coronavirus:.
«Es de extrema gravedad y de consecuencias imprevisibles que un ministro de estado, primero en el magazín de televisión de las 6 pm desde donde dicen que se gobierna al país y, luego, desde casi todos los medios de comunicación, afirme sin ningún recato que desobedecerán el mandato judicial que ordenó exigir examen de PCR a todos los viajeros que ingresen por avión a Colombia y que las autoridades de inmigración de los aeropuertos tendrán que dejar entrar a todo pasajero infectado o no del terrible covid 19.
Las razones alegadas por el alelado Ministro de Salud dicen ser científicas y jurídicas.
Las provenientes de las ciencias de la salud no las explica porque las que existen indican todo lo contrario.
Así lo demuestran hoy en día España, Inglaterra, Francia e Italia que exigen ese PCR a todos los que ingresen a sus países.
Las jurídicas las conocemos ya los colombianos y los viejitos sí que más.
Provienen única y exclusivamente de la jurisprudencia de la Universidad Sergio Arboleda que predica y practica la equivocada tesis de que el mandato constitucional que ampara la tutela no rige inmediatamente sino solamente cuando luego de haber sido impugnada y llevada a altos tribunales es por fin confirmada.
Así hicieron con la que le ganaron los viejitos encabezados por el exministro Hommes.
No la acataron nunca, dejaron correr los términos mientras iba de juzgado a tribunal y de allí a otro más alto y cuando salió el fallo definitivo, era el 1 de septiembre y el decreto que nos dio prisión domiciliaria dejó de regir.
Pero le ganaron a los jueces desobedeciéndolos.
¿Por qué es insensato el gobierno con el coronavirus?
Con la necesidad de exigir el PCR a quienes ingresen al país el asunto tiene un agravante, en marzo cuando la peste no llegaba a Colombia, la misma terquedad o quien sabe cuáles ocultos intereses por favorecer, impidieron que se decretara a tiempo el cierre de los aeropuertos y por allí entró el chorro que nos contagió.
Entonces pensamos que se pretendía favorecer las aerolíneas, que no el turismo que se espantó.
Ahora lo que dizque buscan es favorecer la reactivación del mismo turismo y que aerolíneas, hotelerías, bares y restaurantes sobrevivientes vuelvan a operar.
No se puede ser tan tercamente insensato.
Se da el mal ejemplo de que los mandatos de los jueces no se obedecen, se pone de nuevo en peligro la salud de millones de colombianos y se demuestra que la constitución y la tutela valen huevo porque es más importante el bienestar económico de un reducido porcentaje de compatriotas que la vida de todos los demás.
Gustavo Álvarez Gardeazábal.