Las bocas del silencio, de Juan Antonio Pizarro, es el libro del fin de semana recomendado por el Maestro Gustavo Álvarez Gardeazábal, @ElJodario:

QUÉ LEE GARDEAZABAL, Las bocas del silencio, de Juan Antonio Pizarro, editó Yarumo Libros

Los nuevos novelistas siempre son personas menores de 30 años.

Juan Antonio Pizarro, hermano del mitológico Comandante Pizarro, acaba de publicar a los 77 años su primera novela. Es sorprendente porque si bien demuestra la impericia del escritor, la novela satisface al lector. Obligatoriamente una ópera prima tiene mucho de primitivismo, y más a esa edad, pero como allí también hay manejo de la tensión, habilidad en la descripción y, sobre todo, un hilo conductor que enmarca en tiempo y espacios definidos, todo es un cuadro brillante, aunque mal terminado.

Como no hay conocimiento profundo de estructuras literarias (Pizarro, el novelista, fue hasta su jubilación un alto funcionario de la empresa privada), pero si hay un bagaje histórico de la ciudad de las murallas, sin duda contagiado desde su infancia por su padre, el almirante Pizarro, el libro en 4 de sus cinco capítulos permite conocer o imaginar (da lo mismo) la historia de Cartagena entre los finales de Carlos III y la llegada del pacificador Morillo y de Bolívar.

Pero, muy fundamentalmente enmarcada en el legendario barrio de Getsemaní, recreando las aventuras interminablemente graciosas del abuelo del narrador y describiéndonos el poder de su bisabuela africana, conocedora de saberes manuales y de profundidades esenciales.

El libro podría haber sido una obra completa si en vez de agregar una innecesaria quinta parte con la huida a Haití, lo cierra en la estrecha   calle de San Juan, frente al mural del Restaurante Arrabal, permitiéndonos a los lectores de hoy y de siempre rememorar que en esa casa vivió Bisbis, la bisabuela de la novela, espantando fantasmas y enseñándole a su hija a tejer los vestidos de gloria para las esposas de los amos o el traje luminoso de la virgen de La Candelaria.

Una novela para saborear con un jugo de corozo al tiempo que permite rendirle culto a la esclavería parda del inigualable barrio de Getsemaní, a sus recovecos, sus olores y sabores y en el fondo a esa Cartagena del alma que todos los colombianos llevamos orgullosamente en lo profundo de nuestra nacionalidad.

Gustavo Álvarez Gardeazábal. El Porce, diciembre 6 del 2025”. Escuche el audio de @ElJodario sobre el libro Las bocas del silencio, de Juan Antonio Pizarro: