Diego Armando Maradona murió esta mañana de miércoles por un paro cardiorrespiratorio que no entendió que sobre la tierra existieran ídolos.
Su muerte conmovió al mundo del fútbol, que siempre lo vio como uno de los más grandes de la historia.
Jugadores como René Higuita lamentaron el deceso del 10 argentino:
“Escribo este mensaje con un nudo en la garganta, el dolor de saber esta terrible noticia, al que fue mi ídolo y amigo !! los locos y diferentes a veces somos incomprendidos… pero guardamos grandes virtudes en el corazón …!! buen viaje al más grande de la historia”, dice Higuita en sus redes sociales.
La noticia al mundo la dio, en exclusiva, el periodista Mariano Verrina, en el diario El Clarín, de Argentina.
Según Verrina, Diego Armando Maradona sufrió un paro cardiorrespiratorio en la casa de Tigre, donde superaba una intervención quirúrgica que se le practicó de urgencia en la cabeza.
“…Y un día ocurrió. Un día lo inevitable sucedió. Es un cachetazo emocional y nacional. Un golpe que retumba en todas las latitudes. Un impacto mundial. Una noticia que marca una bisagra en la historia. La sentencia que varias veces se escribió, pero había sido gambeteada por el destino ahora es parte de la triste realidad: murió Diego Armando Maradona”, dice el periodista.
Ídolo argentino, capitán de la Selección gaucha campeona del mundo y autor del llamado «gol de la mano de Dios (marcado con su mano ante los ingleses en el Mundial de México 86), Maradona nació para el fútbol en Argentinos Junior y luego pasó a Boca Juniors.
Su juego lo llevaría a Europa (al Barcelona), pero de 1984 hasta el 91 estaría en el Nápoles, al cual guiaría hasta ganar cinco campeonatos y una Europa League.
Su expulsión en el Mundial de Estados Unidos y el uso de cocaína lo llevaron a perder su rumbo.
Y a decaer hasta ser un ídolo desconocido que vivía de crisis en crisis, un ídolo que no lo pudo salvar ni la mano de Dios.