Mónica Salazar Restrepo le dio una segunda oportunidad a seis familias de disfrutar la vida de sus hijos, entregando su propia vida.
Son las 12 y 10 minutos y Mónica Salazar Restrepo pasa el semáforo de la carrera 29 A en Medellín. Va en su vehículo mazda y de pronto la fuerza de un camión golpea en el lado del conductor. Por una paradoja del destino, el golpe le quita la vida, pero también velocidad al pesado carro que corría de desembocado calle abajo.
Dos segundos después el camión golpea a un vehículo escolar que se encuentra de frente. Los seis niños que viajan en él y el conductor salen heridos, pero vivos.
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Un día después, los padres de los seis niños, los niños y sus profesores asisten a la casa de Mónica Salazar Restrepo, quien al atravesarse con su carro, salvó a quienes estaban en los ocho vehículos que golpeó el camión, hasta que finalmente paró contra un árbol.
Johanna Ramírez, contó así ese momento de agradecimiento.
“¿Recuerdan a la mujer que murió en el aparatoso accidente en El Poblado el viernes? Los niños que iban en la buseta acompañaron a los hijos de la víctima mortal, que con su vida, salvó la de ellos.
“ … Una mezcla de sentimientos: los hijos que perdieron su madre y los padres que tienen una segunda oportunidad con sus hijos”, dijo
En medio de una oración, un mensaje que simboliza esa segunda oportunidad a los niños y sus familias.
“Mónica Salazar Restrepo No te conocimos ni tuvimos la oportunidad de compartir contigo, pero agradecemos el salvar a nuestros hijos. Hoy estás en la gloria de Dios, eres un ángel que entregó su vida por ellos. Elevamos oraciones por ti. Niños, padres y personal de transporte San José de la Salle Preescolar”.
En medio de todos los “me gusta” posibles y de las cientos de veces que se compartido la historia, unas palabras que resumen la vida de esta mujer.
“Mónica Salazar era su nombre. Un angelito”.
