Los verdugos de Colombia persiguen a los niños, y a los mayores de 70 años, pero también a cada uno de los colombianos.
Y Gardeazábal enumera los ocho errores más protuberantes de los verdugos de Colombia, al llegar a sus 100 “Crónicas del Enchuspado”:
“Hoy, al cumplirse 100 días de estar enchuspado quiero rendir un homenaje a los verdugos que, a más de conseguir que todos los mayores de 70 años guardemos prisión domiciliaria, ahora nos prohíben también acudir a las playas cuando ordenen su reapertura.
He escogido para rendir honor y gloria a los momentos acertadísimos del mandato que ejercen quienes he llamado sin exageración “los mocosos” para que sean mis oyentes y lectores los que juzguen con miras a la historia un período crucial de nuestra patria:
1. Aprobar a las volandas la ley de financiamiento. Fue una reforma tributaria camuflada que por buscar más ingresos al estado y haber producido todo lo contrario hoy quieren volverla a redactar.
2. El decreto mediante el cual sacaron del país a Uber para complacer a los taxistas gritones. No dejó contentos ni a los que les arrebataron el trabajo ni calmó a los dueños de taxis y sus conductores. Tenía tales fallos jurídicos que ya fue derogado por inconstitucional.
3. Desarrollar sin previsión alguna, y en el peor momento de la pandemia, el mandato de la ley de financiamiento conocido como día sin IVA, que será recordado eternamente por lo bien planificado y lo conveniente que resultó para acelerar el desespero económico cuando no la peste.
¿Verdugos de Colombia acaban hasta espacios de libertad?
4. La propuesta de la hipoteca inversa para conseguir sostener a los ancianos arrebatándoles al morir el bien hipotecado, montada irrespetando afectos y tradiciones, pensada obviamente para otra cultura no para la colombiana.
5. Los subsidios a la vivienda que facilitan endeudarse por 30 años sin tener en cuenta el historial maldito que dejó el upac y la falta absoluta de garantías de estabilidad jurídica sobre las leyes y el bien adquirido que hoy lo son y mañana quien sabe.
6. La afrenta de enviar a vacaciones por 13 meses al General Salamanca quien como Inspector de la Policía encontró fallas en las actuaciones del General Atehortúa, director de la institución y la ominosa reculada echando para atrás la determinación, pero dejando en el cargo al general acusado.
7. La renuncia aceptada, y después no, de Pachito como embajador por hablar mal del Departamento de Estado y poner en calzas prietas a la nueva canciller, involucrada de lleno en la conversación.
8. La impavidez con que ven desmoronar al otrora glorioso ejército de la patria, escándalo tras escándalo, como si no existiera constitucionalmente un comandante en jefe.
Y ni sigo porque es tal el rosario de hechos memorables, que hasta me arrebatan este espacio mínimo pero libre.