«Darcy», una canina pastor belga especializada en el hallazgo de restos humanos, se sentó sobre un montículo de hojas y plásticos y la delegación especial del Cuerpo Técnico de investigación de la Fiscalía encontró allí el cráneo y el cuerpo del sacerdote Darío Valencia Uribe, quien había desaparecido hace 5 meses en Risaralda.

La canina y el grupo especial de la Fiscalía llevaban 4 días tratando de hallar un punto que señaló Julián Eduardo Cifuentes Gómez a una comisión de la Fiscalía que lo interrogó en París, donde está tentativamente detenido.

Pero en esos cuatro días pasaron en innumerables ocasiones por un sendero, en la Vereda La Cascada, en el municipio de Viterbo, Caldas, pero nunca buscaron bajar a un abismo que se veía en la carretera, hasta que la perrita «Darcy» inició el recorrido y finalmente halló los restos humanos.

¿Qué pasó con el sacerdote Darío Valencia Uribe?

El 25 de abril se denunció que el sacerdote Darío Valencia Uribe había desaparecido tras ofrecer una camioneta de su propiedad en venta y atender a un “supuesto” interesado.

En imágenes de las cámaras de seguridad de la parroquia de María Auxiliadora, en el barrio Turín, de Pereira, se ve al sacerdote salir acompañado de un hombre y luego manejar la camioneta.

Pero el sacerdote no regresó a su iglesia y la activación de su búsqueda permitió hallar el vehículo, de placas GKL 427, en un parqueadero de Viterbo, a 128 kilómetros de Pereira.

Las primeras pistas llevaron a Julián Eduardo Cifuentes Gómez, quien le estaba ayudando a vender su vehículo y que aparece en el video con el sacerdote. Pero al saber que las autoridades lo buscaban, el hombre desapareció y la alerta de interpol llevó a que fuera detenido en Europa, en el aeropuerto Charles de Gaulle, en París.

La semana pasada, un fiscal y un investigador lo interrogaron en París y allí Cifuentes Gómez confesó el crimen y señaló la vereda donde había arrojado el cuerpo del sacerdote Darío Valencia Uribe.

Tras el hallazgo se espera la extradición de Cifuentes Gómez y así conocer las reales causas de la muerte del presbítero, que al parecer no serían económicas ya que el carro fue hallado abandonado en Viterbo.

Las exequias del sacerdote serán este fin de semana.