La toma de la Comisión de Regulación de Energía y Gas de la Superintendencia de Servicios era necesaria, ante el aumento de las tarifas de servicios públicos. Pero también podría mirarse como una medida populista de un gobierno cuestionado.
¿Cuál es la interpretación lógica?, léala acá en la “Crónica de Gardeazábal”, para www.rutanoticias.co:
“LAS TARIFAS AL BANQUILLO
Es posible que, para los defensores a ultranza de la rigidez de la norma constitucional, la determinación del presidente Petro de suspender la delegación que el ejecutivo había hecho en la CREG, Comisión de Regulación de Energía y Gas y en las entidades similares de la Supervivíos en otras áreas de servicios públicos, sea absolutamente válida.
Pero para quienes defienden el cacareado Estado de Derecho, que garantiza el respeto no solo a la Carta Magna sino a sus interpretaciones, el que el presidente Petro insista en declarar una vez más que piensa como Luis 14, el absolutista rey francés, y repita que “el estado soy yo”, puede dizque estar abriendo una brecha para que por allí se cuele una dictadura.
Sin embargo, si se piensa que las tarifas de servicios públicos han sido fijadas por unas comisiones que analizando todos los factores de producción, gasto e inversión intervienen en la determinación de las tarifas y ellas presuntamente terminan siendo una herramienta para que las empresas prestadoras del servicio no arrojen pérdidas y puedan seguir invirtiendo, la actitud del presidente Petro de arrebatarles esa función a las comisiones reguladoras puede ser vista como una medida redentora para poner política y efectivamente coto al régimen abusivo de obligar a pagar a los usuarios para beneficio de quien presta el servicio.
Pero a su vez también, puede ser interpretada como una medida populista que busca el aplauso del público, sacrificando el futuro de la prestación de energía, agua potable, y gas.
Quizás tenga de todo esto un poquito. Que efectivamente Petro tiene aires dictatoriales al estilo de Lenin, su maestro intelectual e ideológico.
Pero también es que el estilo casi mafioso de fijar tarifas solamente entre productores, sin preguntar a los usuarios, ha llegado a su fin, y en ese caso es una medida atrevida e histórica que alguien debía tomar alguna vez para frenar el abuso.
Empero hay quienes creemos que todo tiene su justo medio y que ni es tan populista ni tan anti mafiosa pero que sirve a todos finalmente si se aplica con sentido patriótico y no con afán anti empresarial.
Gustavo Álvarez Gardeazábal. El Porce, enero 30 del 2023.
Escuche el audio de Gardeazábal aquí: https://www.spreaker.com/episode/52582116