Venezuela y Estados Unidos culminaron sus diálogos, a través de países amigos, y pareciera que se preparan para una guerra, o invasión, según los ejercicios militares que cumplen, a pocos kilómetros una de otra, sus Fuerzas Militares.
Al Mar Caribe llegó esta semana el buque de asalto anfibio USS Iwo Jima, que tienen 4.000 infantes de marina a bordo y capacidades militares de asalto con helicópteros y armas de largo alcance, el cual se sumó al despliegue de las fuerzas navales norteamericanas en el Caribe, que desde hace un mes incluyen destructores, un crucero, buques anfibios y aviones de combate.
La respuesta del gobierno de Nicolas Maduro fue desplegar unidades de lanza cohetes en la costa frente al Caribe y convocar a reservista y milicias ciudadanas.
Además, las Fuerzas Armadas, dirigidas por Vladimir Padrino López, activaron un plan de guerra para una aparente invasión norteamericana en busca de derrocar a Nicolás Maduro y su gobernó, por cuyos tres principales dirigentes se ofrece una recompensa de 90 millones de dólares.
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Ese plan de guerra incluye medidas defensivas y de protección en infraestructuras críticas del país, incluyendo aeropuertos y puertos, además el uso y aviones militares en ejercicios de bombardeo y la movilización de fuerzas militares hacia el Aeropuerto Internacional de Maiquetía.
También, se destaca el despliegue de Sistemas de Misiles Tierra-Aire Buk-M2E en la Base Aérea Militar Generalísimo Francisco de Miranda, en Caracas, mientras que barreras de concreto antitanque fueron vistas preparadas en la autopista Caracas – La Guaira, cerca del aeropuerto de Maiquetía.
¿Hasta cuándo seguirá esa demostración de fuerza de Venezuela y Estados Unidos? ¿Y que podría desencadenar la invasión?