Un vigilante de la Brinks, Jhon Fernando Silva Úsuga, recibió medida de aseguramiento como presunto responsable de homicidio agravado, hurto calificado y agravado y porte ilegal de armas de fuego de defensa personal.
Según la Fiscalía, este hombre hirió con arma de fuego a Aldair de Jesús Cueto Díaz, 23 años, supervisor de una empresa de vigilancia privada.
La investigación fue adelantada por un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI).
Según el perito, la víctima sorprendió al procesado cuando sustraía 135 millones de pesos de un cajero electrónico, ubicado en el parque principal de Bello.
Se evidenció que después de un forcejeo, Cueto Díaz recibió un disparo en la cabeza que le ocasionó la muerte.
Servidores del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) establecieron que Silva Úsuga, empleado de la empresa Brinks de Colombia, habría sustraído una llave especial de la compañía para abrir el cajero y acceder al dinero.
El presunto victimario fue capturado por el CTI durante un operativo en el que se le incautó un arma de fuego sin permiso para porte.
El vigilante de la Brinks procesado por homicidio, sólo aceptó cargos por el porte ilegal de armas.