A Iván Duque todos lo manejan a punta de “coscorrones”, lo dice El Jodario, de Gustavo Alvarez Gardeazábal, que resalta como el Presidente de Colombia va de castigo en castigo.

Los “coscorrones” se hicieron famosos por ser el “castigo” preferido del entonces candidato presidencial Germán Vargas Lleras, quien en su soberbia los repartía aquí y allá en su recorrido por el país.

Y ahora, según El Jodario, es Iván Duque quien los recibe, de amigos y enemigos:

“Por primera vez, desde hace 3 años, cuando Fabio Echeverri me habló del seguro presidente Iván Duque, me he puesto en su pellejo y, de verdad, me da pesar.

“Debe ser imposible gobernar con semejantes sopapos como los que le han pegado, casi al mismo tiempo Trump, Putin y Vargas Lleras. El primero de ellos se lo pegó el presidente de Estados Unidos. Como había acudido ingenuamente a Washington aupado por el hijo de Fabio y sus amigotes de la ultraderecha gringa, se humilló ante Trump y actuó como el mayordomo sumiso de una finca norteamericana. Como pago por su humildad, Trump acaba de condenarlo públicamente como un incapaz que no ha hecho nada. ¡Pobre hombre, qué coscorrón!

“Como le creyó a los gringos de Luigui Echeverri, al senador Rubio y a su combo, en el que está Piñeira el de Chile, se fue a hacer el show a la frontera y a torear a quien le deben plata en todos los costados de Venezuela: a Rusia. Y como Putin sabe que cuando Trump se mama por plata no defiende a nadie, Rusia ha terminado por casi amenazar con aplastar a Colombia si se sigue metiendo con Venezuela. ¡Qué coscorrón!

“Y como si fuera poco, Germán Vargas Lleras, quien perdió su opción presidencial por el coscorrón más caro de la historia colombiana, le pega uno de señora madre y consigue que los congresistas de Cambio Radical, unidos a los liberales y a los del partido de la U se opongan a las objeciones que el presidente Iván Duque le ha hecho a la ley estatutaria de la JEP. ¡Otro coscorrón!

“Nadie me puede negar entonces que alguien tan coscorroneado pueda pensar con claridad y actuar como buen gobernante. Tal vez le estamos dando muy duro. Pobre hombre”.