Aníbal Gaviria Correa cumplió la semana anterior una agenda de reuniones muy amplia, como corresponde a un Gobernador de Antioquia.
Entre las citas, tuvo una con empresarios, larga y productiva.
Uno de ellos, es familiar de la primera persona que, oficialmente, fue diagnosticada con coronavirus en Antioquia.
La mujer, de 50 años, estuvo de vacaciones en España y días después de llegar al Valle de Aburrá presentó algunos síntomas de resfriado, que no se le quitaban, al consultar con las autoridades médicas, fue diagnosticada con el virus.
Pero en el momento de la reunión ni la familia, ni los empresarios, ni el Gobernador Aníbal Gaviria, ni los demás asistentes a la reunión, sabían que se estaba incubando la enfermedad en el cuerpo de la mujer.
Como es obvio, en ese momento no se aplicaban todas las medidas de asepsia, ni los controles en lavado de manos, ni la ya famosa prohibición de darse la mano o de estrellarse las manos e incluso de los abrazos en los saludos.
Hoy, las autoridades sanitarias acompañan medicamente, en el llamado “cerco epidemiológico”, a las primeras 80 personas que se “relacionaron” en algún momento con la primera paciente diagnosticada con el coronavirus en Antioquia.
Lista que posteriormente aumentaría a otras 40 personas más, que se encontraron socialmente con ella, en los días en que la enfermedad se incubaba en ella.
Hasta hoy, en la familia no se presenta sintomatología asociada al virus, pero el periodo de incubación terminará la próxima semana.
La pregunta es si ese círculo externo que se relacionó con la familia de la paciente también debería hacerse el examen.
Y entre ellos, Aníbal Gaviria, quien sigue con una agenda oficial y pública con demasiadas personas y ahí es donde da temor que la propagación avance más y más.
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