Argumentando que la ejecución del contrato de construcción y puesta en marcha de Hidroituango es “perjudicial y desequilibrado para la Sociedad Hidroituango y el departamento”, Aníbal Gaviria se unió a la lista de políticos que abandonan a Daniel Quintero, a quien muchos llaman el nuevo samuel moreno, y prefieren hacerle “fo” y estar cerca de él.
Por eso, el Gobernador Aníbal Gaviria, en una carta de 4 páginas, le pide al alcalde Daniel Quintero y al gerente de Empresas Públicas de Medellín, Jorge Carrillo, terminar el contrato BOOMT, firmado en 2010, y que sean la Gobernación y la sociedad Hidroituango las que continúen la construcción y operación de la mayor central hidroeléctrica de Colombia.
Lo curioso es que ese alejamiento de Aníbal Gaviria, al igual que el de políticos como Gabriel Jaime Rico, Jaime Cuartas, Lucas Cañas, y tantos otros, se da a los tres años de conocer “al socio” y no cuando se empezaron escuchar los rumores sobre quién era en realidad.
Y también cuando las campañas políticas entran en su recta definitiva y cualquier “ruido” o “amistad pasada” puede afectarlas.
En su misiva, el gobernador Aníbal Gaviria señala que en el contrato “EPM se lleva todo”, y a la sociedad no le queda nada:
“… por los informes presentados en el Tribunal con interpretaciones donde se asegura que, a partir de la proyección del plan de negocios de la central hidroeléctrica, la generación, los ingresos de cargo de confiabilidad y el costo promedio de capital, la sociedad no tiene derecho a remuneración alguna y adicionalmente calcula un valor neto negativo del proyecto en 960 millones de dólares calculados a 50 años de operación y 883 millones de dólares en 70 años”.
¿Qué pide Aníbal Gaviria a Daniel Quintero?
Así, “no puede ser que en 50 años EPM gane miles millones de dólares, mientras que la Sociedad Hidroituango y los socios, el Idea y el departamento, no reciben un solo peso”, dice el mandatario.
La Gobernación, dueña directamente del 2.14 %, y el IDEA, poseedora del 50,74 por ciento, tienen demandada a EPM por cerca de un billón y medio de pesos (solo por lo dejado de recibir por ventas de energía y los retrasos hasta hoy) sin contar eventualidades futuras que se puedan presentar en Hidroituango.
La propuesta de Aníbal Gaviria es que EPM retorne el proyecto, entregue las acciones que tiene allí y la Gobernación retiraría todas las demandas.
Además, dice que de no llegarse a un acuerdo se podrían interponer más demandas “… por desequilibrio económico y financiero del contrato y por incumplimientos”
Lea aquí la carta del gobernador:
