La Fiscalía de Colombia logró extinción de dominio para 16 bienes de la banda que comerciaba drogas adulteradas o medicinas vencidas e incluso algunas que “robaban” a pacientes terminales (con cáncer o SIDA), elementos que tienen valor superior a los 10 mil millones de pesos.
Además, la Fiscalía General de la Nación y la Policía de Bogotá lograron identificar 4 farmacias que vendían las drogas adulteradas o vencidas, las cuales eran mezcladas con cemento blanco, ácido bórico y diversas anilinas y saborizantes.
¿Qué enfermeros robaban medicinas a sus pacientes?
Las medicinas de “control”, tal como lo narró www.rutanoticias.co el sábado 20 de abril, era “robadas” por dos enfermeros a sus pacientes, quienes aplicaban “otras drogas” o “placebos” mientras hurtaban y comercializaban las originales.
En total son siete los detenidos, pero sobresalen Jairo Alejandro Zapata Marroquín y Leidy Johana Saldaña González, trabajadores del sector salud.
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Esas medicinas eran vendidas, sin ningún control y sin la “cadena” de protección o de frío necesarias, en esas farmacias y a muy altos costos.
¿Desde cuándo falsifican drogas en Bogotá?
Los 16 bienes de la banda que comerciaba drogas adulteradas y las 4 farmacias quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).
“Los elementos de prueba indican que desde 2018, distintas personas habrían usado estas propiedades para falsificar indiscriminadamente medicamentos con cemento blanco, ácido bórico y anilinas; alterar su presentación o composición, y ponerlos a la venta en droguerías como tratamientos para el cáncer y otras enfermedades
«En este proceso la banda que comerciaba drogas adulteradas se apoyaba con máquinas artesanales para la elaboración y secado de los medicamentos, molinos para pulverizar, un horno artesanal para el secado de la materia prima, plástico cortado para la elaboración del blíster y diferentes clases de presentación de los fármacos. Además, tenían máquinas, sellos de seguridad, tapas, empaques, estampillas, etiquetas y otros elementos utilizados para modificar fechas de vencimiento y lotes de fabricación de los productos, con lo que se lograba cambiar su apariencia y comercializarlos como auténticos», señala el boletín de prensa oficial de la Fiscalía General de la Nación.
La investigación aún no se ha cerrado, pues la Fiscalía y la Policía de Bogotá indagan sí, a raíz de la aplicación de placebos y de medicinas adulteradas o falsas, habrían fallecido pacientes de los enfermeros o familiares de los compradores de esas “medicinas” adulteradas.
