Por solicitud de la Fiscalía un juez de control de garantías impuso medida de aseguramiento en su lugar de domicilio para 2 policías corruptos de Medellín, capturados tras exigir el pago de $8 millones a dos ciudadanos, a cambio de no judicializarlos.
A pesar de la evidente extorsión, el juez consideró que los dos policías corruptos de Medellín podían seguir el proceso judicial en su contra desde su casa y no desde la cárcel, donde pedían se les enviara.
«La medida afecta al intendente Yerson Niray Pinilla Pino y al subintendente Edwin Junior Herrera Ballesteros, como presuntos responsables del delito de concusión. De acuerdo con la investigación adelantada por un fiscal de la Unidad de Delitos contra la Administración Pública de la Seccional Medellín, el 26 de febrero en el centro de la ciudad los uniformados habrían interceptado a un hombre y una mujer se movilizaban en un vehículo de alta gama y les solicitaron la suma de 8 millones de pesos, a cambio de no judicializarlos por utilizar el automotor que presentaba una orden de embargo expedida por un juez civil.
«Ante la supuesta presión de los procesados, las víctimas se dirigieron hasta un cajero cercano, siempre escoltados por los presuntos victimarios, a quienes les entregaron la suma de $5.600.000. Se evidenció además que, para dejarlos ir, al parecer, los policiales les suministraron el número de una cuenta bancaria en la que debían consignar el dinero restante», señala el boletín de prensa de la Fiscalía de Colombia.
Según la denuncia, uno de los investigados les devolvió 30 mil pesos por si tenían algún problema mecánico con el automotor.
Pinilla Pino y Herrera Ballesteros fueron capturados mediante orden judicial por servidores de la Policía Nacional y durante las audiencias concentradas no se allanaron a los cargos imputados.