Es el “muro de Peldar” pero desde este fin de semana es el muro privado vandalizado por la izquierda en Envigado, aprovechando, al parecer, una “vieja amistad” entre el alcalde Raúl Cardona y un supuesto líder de las juventudes en ese municipio del sur del Valle de Aburrá.
Esa “vieja amistad” fue confirmada incluso cuando el concejal Alejandro Sánchez, advirtió a la secretaría de Cultura de Envigado lo que se iba a hacer en ese espacio que no es del municipio y que pertenece a una empresa privada…pero la respuesta de esa entidad al concejal era que se “acompañaría desde la institucionalidad”.
Finalmente, este fin de semana el amigo del alcalde y otros mostraron sus fotos y “diseños” con el muro vandalizado por la izquierda en Envigado, por donde no apareció ni la Policía ni “espacio público”, ese grupo de “seguridad” que acosa a los artistas y ciudadanos advirtiéndoles, cual oficina, que “…Envigado es Envigado y aquí pasan cosas”.
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Mas tardaron los vándalos en irse que llegar otros ciudadanos del municipio y cubrir el muro de Peldar y eso deja varias preguntas:
¿Por ser “amigo de Raúl” se puede vandalizar propiedades privadas en Envigado?
El muro privado vandalizado por la izquierda en Envigado, ¿será recuperado por la Alcaldía? o ¿por sus dueños?
¿Serán capaces las tres constructoras dueñas del lote de exigir respeto por su propiedad?, o ¿les dará miedo del alcalde y su amigo?…o ¿les dará miedo de la izquierda de Envigado?
Además, el muro está en los alrededores de un bien de interés cultural y para intervenirlo hay que tener permiso del Ministerio de Cultura, pero, sobre todo, buen gusto.
