La cápsula Crew Dragón se unirá esta mañana de domingo con la Estación Espacial Internacional, ratificando así el éxito de la operación conjunta de la Nasa y de Space X de lanzar nuevamente astronautas desde suelo norteamericano.

Durante los últimos nuevos años, la NASA contrató a la agencia rusa del espacio (Roscosmos) para llevar a los astronautas, a un costo de 84 millones de dólares por cada uno. Esto tras la cancelación de los vuelos de los transbordadores en el año 2011.

El despegue de este sábado se cumplió tras la postergación que sufrió la misión el miércoles pasado, cuando las condiciones climáticas impidieron el despegue.

La Crew Dragón fue propulsada por el cohete Falcon 9, de la compañía Space X, cuyo dueño es Elon Musk.

Musk es un sudafricano nacionalizado canadiense y norteamericano que a sus 48 años también es dueño de PayPal y Tesla automotores.

Como diseñador y físico, Musk se involucró en la terminación de la Crew Dragón, la cápsula que permanecerá en el espacio entre 6 y 16 semanas, dependiendo de su capacidad para soportar las condiciones extremas.

Durante esas semanas, la cápsula viajará pegada a la Estación a una velocidad de 25 veces la del sonido.

Según los científicos de Space X algunas de sus losas externas podrían perder sus condiciones térmicas afectadas por elementos del llamado “basurero espacial”.

Pero esa será una preocupación para luego.

Lo cercano es que este domingo logre conectarse a la estación y confirme así que los vuelos privados al espacio serán posibles.

Ya Musk dijo que su próxima misión serán la luna (posiblemente en el año 2024) y luego Marte.