La crisis del Metro de Medellín se vive diariamente.
“El pasado mes de agosto se presentaron tres fallas en un solo día en la operación del Metro. Durante el mes de octubre ya se han presentado otras tres fallas, ocasionando grandes retrasos y afectando la movilidad de los usuarios que utilizan el sistema”, dice Paulina Aguinaga.
Esto es solo una pequeña radiografía de los múltiples daños técnicos que ha sufrido el Metro en los últimos años, tanto así que muchos ciudadanos coinciden en que la calidad ha disminuido notablemente.
“Recordemos que todo el sistema en conjunto moviliza diariamente más de 1.500.000 usuarios y por eso cualquier mínimo contratiempo colapsa la movilidad en el Valle de Aburrá. Es necesario que los ciudadanos conozcan la verdad en cuanto a la obsolescencia tecnológica, cumplimiento de la vida útil de la infraestructura y de los equipos, oportunidad en los planes de mantenimiento preventivo y correctivo y cómo se avanza en la atención de los 13 puntos críticos detectados en la canalización del río Medellín”, agrega la exconcejal en su comunicado.
“Estamos viviendo las consecuencias de la deficiente ejecución de los recursos asignados a mantenimiento, donde el Metro entre 2007 y 2019 dejó de ejecutar $330 mil millones. Además, parte de los recursos del Fondo de Repotenciación y Reposición se gastaron en tiquetes aéreos, almuerzos, souvenirs, entre otros gastos que nada tienen que ver con la correcta prestación del servicio”, denuncia.
¿Cuándo llegarán los trenes del Metro de Medellín?
Otro tema que preocupa es la lentitud para la compra de nuevos trenes, que mejorarían considerablemente la frecuencia y disminuiría la congestión en horas pico.
La compra de los trenes se demora, en promedio, 5 años.
En diciembre de 2019, cuando la capacidad del sistema ya estaba desbordada, fue aprobada la adquisición de 12 trenes para comenzar operación en 2025 con un costo esperado de 66 millones de euros; este proceso debía comenzar en 2020, sin embargo, fue suspendido a comienzos de ese año y aún continúa en ese estado.
Cabe destacar que es una excelente noticia la recuperación de la demanda de viajes en el sistema Metro, teniendo en cuenta que para el año 2022 se proyectan 298 millones de viajes, cifra similar a la obtenida en 2018.
Sin duda alguna los más perjudicados son los usuarios, de los cuales las mujeres son el 61% y el 93% de ellos pertenecen a los estratos 1, 2 y 3, quienes gastan en promedio hasta el 30% de sus ingresos en transporte.
«Estas deficiencias agravan el problema de movilidad en la ciudad, porque un servicio ineficiente estimula la compra y uso de motocicletas, impactando el medio ambiente», dice Paulina Aguinaga al explicar la crisis del Metro de Medellín.