Edwin Besaile dejó de ser oficialmente el Gobernador de Córdoba este lunes, cuando su abogado se notificó de la sanción de 10 años que le impuso la Procuraduría General de la Nación.
Aunque el mismo documento especifica que tenía 8 días para notificarse personalmente, el ex mandatario envió a su abogado, quien le confirmó que la decisión es ya irreversible.
Edwin Besaile fue investigado por la Procuraduría, y separado inicialmente de su cargo, por la corrupción alrededor del llamado “cartel de la hemofilia” y los sobrecostos evidentes en las terapias de rehabilitación a menores en condición de discapacidad.
La notificación de la destitución de Edwin Besaile, entregada este lunes también por la Procuraduría al gobierno de Iván Duque, permitirá que este nombre un gobernador para el año que falta, el cual saldrá de una terna enviada por el partido de la U.
Además de Besaile, la sanción de 10 años para ejercer cargos públicos también cobija al exgobernador Alejandro Lyons y a los exsecretarios de Salud, Edwin Preciado Lorduy y José Jaime Pareja Alemán.
Los dineros pagados por la Gobernación se hicieron a la IPS Funtierra Rehabilitación, con la cual ni siquiera se tenían contratos. En total fueron cerca de 5 mil millones de pesos.