El camerino de Nacional parecía haberse “saneado” después de la salida de varios veteranos que decían qué se hacía, o no, en el equipo verde de Antioquia.
Era tan pesado ese camerino de Nacional que en la final de la Liga BetPlay Dimayor 1 de 2023, el 24 de junio, fueron los veteranos los que “pararon” los cambios ordenados por el entonces técnico Paulo Autuori y demostraron “su poder ante el entrenador”.
En ese momento, minuto 35 del segundo tiempo y con empate 1 a 1, Jerson Candelo y Dorlan Pabón, corrieron donde Autuori y en dos ocasiones pararon los cambios, algo que desató polémica en el país por la cara de malestar que el brasilero hizo ante las cámaras de televisión.
El juego de la final se fue a penales y Dorlan Pabón, Jarlan Barrera y Cristian Zapata fallaron los tiros penales, lo que prácticamente significó el retiro de Paulo Autuori.
¿Qué pasa en el camerino de Nacional?
Finalmente, en febrero de 2024 se anunció a Pablo Repetto y salieron muchos de los veteranos, pero parece que el “mando que tiene el camerino de Nacional” sigue. Aupados los jugadores, quizás, por la grandeza del club al que dicen amar y del cual “siempre quisieron portar su camiseta”.
Así se vio en el juego de Nacional contra Once Caldas, cuando contra toda estrategia técnica, los jugadores claves en el medio campo y la defensa subían a “atacar”, descuidando su respectiva área de juego. Una estrategia que no estaba en lo que se le conoce a Pablo Repetto como director técnico.
El resultado, Nacional perdió el invicto que llevaba (tres victorias en línea y el liderazgo del torneo) y sumó una derrota, 2 a 0, que dejó el sinsabor de que una era la estrategia de Repetto y otra la de los jugadores.
Ahora, Nacional comunica la salida de Repetto como director técnico, y el equipo queda tercero en la Liga BetPlay Dimayor 2 de 2024, con siete partidos jugados y 13 puntos:
¿Quién llegará? Se habla de Efraín Juárez, un desconocido en el fútbol suramericano pero que, como sea, tendrá una gran tarea, “limpiar el camerino de Nacional”, algo aparentemente difícil porque este año el club contrató nueve refuerzos, que por lo visto llegaron con malas mañas.