Si no quiere una lectura pesada y solo citas elementales, léase El Desdén de los Dioses, de Alejandro Gaviria, parece señalar Gustavo Álvarez Gardeazábal, @ElJodario, en su recomendado literario del fin de semana:
“QUÉ LEE GARDEAZABAL, El Desdén de los Dioses, de Alejandro Gaviria, editado por Debate
El exministro Alejandro Gaviria es una contradicción permanente, pero como se nutre de ellas termina siendo un pensador moderno que se mira al espejo en una época en que es mejor tomarse una selfi.
Este, su último libro de pequeños ensayos que inquietan a los cultos que lo lean y aburren a los incultos, es una colección de narraciones distópicas, a veces muy pesimistas, otras esperanzadoras. En cada una, cualquiera que sea la cambiante posición ideológica del narrador de estos medios ensayos y medio ficción, se advierte un escritor dotado del humor negro del burletero inteligente.
Vuelve a apercollar al fantasma de su padre y, obviamente, a darse golpes de pecho por no haber conversado con él todo lo que ahora siente sobre quien fuera modelador de su vida. Usa entonces la fórmula agradable pero irresponsable del monólogo para que él oiga en la eternidad. Abona frases esculpidas en piedra, como para que el lector las subraye y las cite y otras para el consumo diario pero que resultan tan brillantes como elementales.
Por eso afirma que la vejez quizás se detecte cuando uno llega al momento en que no quiere experimentar más. O aquella del eterno arrepentido de que nadie existe si no hay un amor.
Podría entonces decirse que es un libro superficial que obliga a pensar. O que resulta siendo tan profundo en su manera de interpretar el futuro distópicamente que encierra la verdad del mundo real, del que nos atropella todos los días.
Un libro amable, que no deja ni heridas ni carachas, que puede resultar tan eterno como las cucarachas o tan rápidamente olvidado como los que se colocan en las estanterías de las ferias del libro que se hacen para que no se corrompa el vicio de leer.
Un libro tan correctamente escrito que corre el peligro de ir construyéndole a Gaviria el nicho cerrado de un grupo de señoras lectoras incapacitadas de tejer, pero ansiosas de encontrarse la satisfacción en unas pocas páginas y un libro casi que escrito en homenaje a la eterna contradicción política y económica que ha hecho del exministro de Salud y de Educación un eterno candidato a la presidencia, pero un permanente derrotado electoralmente.
Gustavo Álvarez Gardeazábal. El Porce, agosto 17 del 2024″.
El Desdén de los Dioses, de Alejandro Gaviria, el libro para el fin de semana.
Escuche el audio con la reseña del libro El Desdén de los Dioses, de Alejandro Gaviria: