Tres adolescentes, con edades entre 15 y 16 años, eran los encargados de cobrar la vacuna que una familia de extorsionistas venezolanos “cobraba” a comerciantes y ciudadanos de Itagüí.
Según la Policía, los delincuentes obtenían cerca de 100 millones de pesos mensuales por las extorsiones.
Seis adultos, y esos tres integrantes de la familia de extorsionistas venezolanos, fueron capturados y judicializados, gracias a las denuncias ciudadanas y a la actuación de la Fiscalía General de la Nación, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y la Alcaldía de Itagüí:
“Gracias a estas labores, se logra la captura por orden judicial de seis personas de 21 a 34 años de edad y la aprehensión de tres adolescentes, de 15 a 16 años, quienes no solo eran presuntamente integrantes de un grupo criminal, sino también miembros de una misma familia de nacionalidad extranjera, que exigían sumas de dinero de entre 500 mil y 2 millones de pesos para permitir que los ciudadanos continuarán con sus actividades laborales o personales sin causarles daño”, dice el boletín de prensa oficial de las autoridades.
“Se logró determinar que los adultos utilizaban a los menores de edad para recibir los dineros de las diferentes extorsiones y les daban indicaciones de lesionar a quienes no hicieran caso.
Además, los instrumentalizaban para vender sustancias alucinógenas en los diferentes barrios de Itagüí.
Estas personas fueron dejadas a disposición de las autoridades judiciales por los delitos de extorsión, concierto para delinquir, desplazamiento forzado, y hurto calificado y agravado.
Vea la captura de los extorsionistas venezolanos AQUÍ:
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En otra diligencia se logró la captura por orden judicial de otras tres personas, quienes se hacían llamar “La garra”, “el flaco” y “valentina”, además de la captura en vía pública por orden judicial de “gafas”, quienes son señalados de ser los encargados de abastecer las plazas de vicio, la venta de estupefacientes y de recibir el dinero de las extorsiones.
Con estas dos operaciones se logró evitar el pago aproximado de 200 millones de pesos mensuales, producto de la extorsión y venta de estupefacientes.
«La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá invita a la comunidad a continuar denunciando estos hechos que ponen en riesgo la integridad física y el patrimonio económico de las personas, en la línea 165″, agrega el boletín de prensa.