Gabriel Jaime Rico dedicó los últimos 30 días a mostrarse como un “experto en energía” con la ambición interna, al parecer, de que lo nombraran como gerente de Empresas Públicas de Medellín.

Y es que Gabriel Jaime Rico parecía competir con Mabel López, la exgerente de Teleantioquia, en auto entrevistarse en cuanto medio de comunicación existiera, contando lo grande de sus supuestas realizaciones y exaltándose como los “elegidos”.

Pero Rico se auto promocionó tanto que, en la última entrevista que dio, hizo “corto” y él solo se sacó de la lista de candidatos a ese cargo.

Fue en el periódico El Colombiano. A Rico le preguntaron si no le preocupaba que su nombre levantara tanta “roncha” y él, ingenuamente, mencionó que todo el equipo de empalme de Daniel Quintero y hasta su “casi seguro jefe” habían sido tildados de desleales y que de todos “se hablaba pestes”.

Meter a su “jefe” en la misma olla donde los críticos cocinaban a Gabriel Jaime Rico, al parecer no le gustó nada al quinterismo y Rico no fue mencionado ni para darle las gracias en la posesión del mandatario de la capital paisa.

¿Qué dijo Gabriel Jaime Rico en El Colombiano ?

“Cuando se anunció su nombre para el empalme hubo polémica. ¿Qué tiene que decir sobre eso?

“Le cuento que en un día y medio que estuve con Daniel Quintero le reprocharon a casi todos los miembros del comité de empalme, de todos encontraban alguna cosa para decir. A unos les dijeron que habían estado metidos en unos rollos de Reficar, escuché de otros que les dijeron desleales, incluso de unos que fueron candidatos a la Alcaldía también hablaron pestes.

“O sea, es imposible que los nombres les gusten a todos porque nadie es monedita de oro para caerle bien a todo el mundo. Pero cuando usted tiene un aporte que dar, lo da en beneficio y en servicio a la ciudad. Es más, le pongo un ejemplo: del que más han rajado es de Daniel Quintero: le dijeron petrista, izquierdoso, que iba a acabar con la ciudad y él, en cambio, ha demostrado lo contrario, que es capaz de convocar a la ciudadanía que incluso no votó por él …”.

Gabriel Jaime Rico salió de Medellín en medio del escándalo por los contratos de Plaza Mayor y las pérdidas allí generadas, que según Gabriel Harry, integrante de la Junta Directiva, habrían superado los $ 12 mil millones. 

Rico viajó a Bogotá después de que el gobernador Luis Pérez trató de nombrarlo en su gabinete, pero las críticas no lo dejaron posesionar. Allí, manejaría una empresa relacionada con la Amazonía y se reencaucharía al conseguir gran parte de la financiación de la campaña de Daniel Quintero a la Alcaldía.

Aparentemente, su idea era ser gerente de EPM y de un momento a otro apareció en cuanto medio de comunicación quisiera escucharlo como “experto en energía”, hasta que sus palabras produjeron un corto circuito que lo quemó con el quinterismo.

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