El panorama encontrado por el Gobernador Luis Pérez en su visita a los municipios cercanos a Hidroituango “es difícil”, según lo calificó el mandatario.

Según el Gobernador 60 mil personas se encuentran sin acueducto y sin el suministro de agua potable; las labores económicas están suspendidas; los maestros y rectores pidieron desescolarizar la población educativa por falta de agua y víveres; hecho que el gobernador demandó priorizar en la solución de los problemas.

En Caucasia el Gobernador revisó la situación de la bocatoma del acueducto municipal, su abastecimiento de agua desde el río Man y las acciones implementadas para contrarrestar la disminución del caudal de este afluente del río Cauca.

Para aliviar la realidad de la comunidad se llevaron tres bombas que se ocupan en nutrir la bocatoma, la misma que se está fortaleciendo con un canal y bolsacretos que reorientan el flujo del agua hacia el caudal alimentador.

Encontró, además, el mandatario seccional que se había dispuesto de doce carrotanques para abastecer de agua potable a las comunidades afectadas, dándole prioridad a los centros de salud y a las instituciones educativas.

En Cáceres, el Gobernador explicó que la visita no sólo busca defender la vida de las personas, sino además identificar a quienes se hayan quedado sin empleo y aquellos que de una u otra manera se vean afectados, para informar a EPM demandando que se ocupe no solo del tema ambiental de Hidroituango sino que resuelva los problemas de las personas.

También el Gobernador le requirió a EPM que retome el control de Hidroituango para evitar que cada tres o cuatro meses entremos en este tipo de crisis, con el corazón en la mano y el sufrimiento de las comunidades. Y reclamó que además de salvar las vidas, hay que indemnizar a las personas por los perjuicios causados.