En tercer debate se hundió el proyecto de reforma laboral en Colombia. Los ocho senadores que habían apoyado el archivo de la ponencia la semana anterior se mantuvieron en su posición, a pesar de las amenazas y hostigamientos de sectores petristas.

Pero, también y muy peligrosamente, se recibió una nueva amenaza  que venía directamente de Gustavo Petro, en otro de sus desvaríos diarios y que podría incluso incitar a la violencia…”Si el pueblo es traicionado, el que se va es el traidor, no el pueblo”, dijo.

La votación en la comisión séptima generó ocho votos a favor de archivar el proyecto de reforma laboral en Colombia y seis en contra de esa determinación.

Por el archivo de la reforma laboral votaron ocho de los congresistas de la Comisión Séptima del Senado de la República: Miguel Ángel Pinto, Ana Paola Agudelo, Esperanza Andrade, Alirio Barrera, Berenice Bedoya, Nadia Blel, Honorio Henríquez y Lorena Ríos.

La decisión generó un amplio apoyo de los colombianos e incluso de gremios industriales, que alertaban sobre la posible pérdida de unos 450 mil empleos si se aprobaba esa reforma.

Ante el anuncio del archivo, el ministro del Trabajo, Antonio Sandino, aseguró que se recuperarán algunas de las propuestas que contenía el proyecto y que estas se implementarán a través de nueve decretos del Gobierno.

Entre los puntos que quiere establecer el ministerio de Trabajo estarían el inicio de la jornada nocturna, que pasaría de las 9 de la noche a las 7 P.M, y los pagos de dominicales, que subirían del 75 al 100 por ciento.