La vida y la suerte de Álvaro Córdoba, hermano de Piedad Córdoba, quedó en manos del Presidente Gustavo Petro, tras aprobar la Corte Suprema su extradición a Estados Unidos.
La vida porque a sus 63 años (nació en febrero de 1959) y con una acusación de integrar una red de narcotráfico de las FARC – disidencias alias gentil duarte-, es difícil que tenga una pena inferior a 25 años en Norteamérica, y que regrese con vida a Colombia.
Afortunadamente, para él, la Corte Suprema de Justicia de Colombia avaló su extradición por narcotráfico y no por un supuesto manejo y venta de armas para esa guerrilla, señalada como terrorista por los Estados Unidos.
Si se hubiera avalado el cargo de tráfico de armas, muy seguramente se doblaría su condena.
Aun así, el camino para Álvaro Córdoba es complicado, porque llegará a la Corte del Distrito de Nueva York con dos testigos directos en contra.
Son dos supuestos empresarios mexicanos que se reunieron en tres ocasiones con él para definir el apoyo político a Piedad Córdoba al senado, y quienes, al parecer, eran agentes encubiertos de la DEA que buscaban infiltrarse y conocer el manejo del narcotráfico desde las disidencias alias gentil duarte.
Extrañamente, esa búsqueda los llevó a Álvaro Córdoba, candidato al concejo de Medellín en el año 2011, por el partido Liberal, y a Libia Amanda Palacio Mena, conocida como alias “Amanda” y Alberto Alonso Jaramillo Ramírez, también solicitados en extradición.
Lo curioso es que una extradición debe cumplir cuatro procesos desde el momento en que la persona es detenida lo que hace que, generalmente, se demore entre uno y dos años.
Álvaro Córdoba, detenido en febrero de este año, ya cumplió los cuatro procesos, mientras que las otras dos personas capturadas apenas están en el primero de ellos.
¿Qué pasará con Álvaro Córdoba Ruíz?
Para Piedad Córdoba todo hace parte de una campaña política en su contra, tras su ingreso al senado de la república y su permanencia en el pacto histórico.
Ahora será Gustavo Petro quien deba decidir si extradita a Álvaro Córdoba, hermano de Piedad Córdoba, su “lugarteniente política”, tal como lo prometió en campaña.
O, quizá, empiece a negociar con Estados Unidos la no extradición de colombianos, como lo dijo en su discurso de posesión.