El Suzuki Swift fabricado en India y Japón, con dos bolsas de aire como equipamiento estándar, obtuvo cero estrellas en la medición de seguridad de Latin NCAP.
El modelo compacto popular obtuvo 15.53% en Protección de Ocupante Adulto, 0% en Protección de Ocupante Infantil, 66.07% en Protección a Peatones y Usuarios Vulnerables de las Vías y 6.98% en Sistemas de Asistencia a la Seguridad. El resultado es válido para las versiones hatchback y sedan.
El resultado de cero estrellas para el Suzuki Swift se explica por la protección lateral pobre al adulto, la apertura de puerta en ese test, la ausencia de prueba de comprobación de cumplimiento de la norma UN32 de impacto trasero que impide al vehículo puntuar en test de latigazo.
Asimismo, el resultado se debe a la falta de bolsas aire de protección lateral de cabeza (airbags de cortina) como equipamiento estándar, la ausencia del ESC estándar y la decisión de Suzuki de no recomendar Sistema de Retención Infantil (SRI) para los niños.
Este vehículo no pasaría el test de la norma UN95 de impacto lateral de la ONU debido a la apertura de la puerta en el choque lateral.
El modelo Swift es vendido en Europa con 6 bolsas de aire y ESC como estándar, mientras que el modelo vendido en América Latina no ofrece bolsas de aire laterales de cuerpo y airbags laterales de cabeza ni ESC como estándar.
La versión para América Latina del Swift aun ofrece de serie un cinturón de seguridad de dos puntas en la posición central trasera, a pesar de los riesgos de lesiones conocidos debido a su uso.
¿Por qué son decepcionantes los carros Suzuki?
Alejandro Furas, Secretario General de LatinNCAP dijo que es decepcionante y molesto el desempeño pobre en seguridad ofrecido por Suzuki para los consumidores de América.
«Latin NCAP exhorta y alienta a Suzuki a mejorar drásticamente la seguridad estándar de estos modelos lo antes posible. Los consumidores de América Latina estamos forzados a pagar más que el precio básico para obtener el mismo equipamiento de seguridad que Renault/Dacia y Suzuki ofrecen como estándar en otros mercados como Europa. En algunos casos estas marcas ni siquiera los ofrecen como opcionales para América Latina y el Caribe. La seguridad vehicular básica, la cual es estándar en mercados de economías maduras, es un derecho que los consumidores de América Latina y el Caribe debemos exigir sin tener que pagar extra. Estos elementos de seguridad actúan como vacunas para una de las pandemias más severas como son las muertes y lesionados causados por siniestros de tránsito. Los consumidores tienen el derecho de recibir la misma vacuna suministrada en cualquier otro lugar sin tener que pagar más por ella”, dijo.
Latin NCAP es miembro asociado de Global NCAP y apoya el Decenio de Acción de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial, especialmente el pilar referido al vehículo del Plan Mundial y a la iniciativa Stop the Crash.