Quien quiera ser presidente de Colombia debe conquistar Antioquia y así lo da a entender la presencia de Miguel Uribe en Medellín, donde llenó el Pabellón Verde de Plaza Mayor y demostró que tiene una fuerza electoral fuerte en el departamento.
Primero hay que hacer dos recuentos:
Uno que el Centro Democrático tiene 5 precandidatos inscritos y dos de ellos son de Antioquia, Paola Holguín y Andrés Guerra, mientras que los “foráneos” son María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Miguel Uribe Turbay.
Y el segundo es que los votos paisas son definitivos para ser presidente de Colombia, así que quien quiera ser Presidente deben venir a Antioquia, conquistarla y asegurar unos votos que pueden ser decisivos.
Bien lo supo Iván Duque, quien logró en Antioquia 20 de cada 100 votos que lo eligieron Presidente. En su campaña electoral en tierra paisa obtuvo 1’844.027 votos, mientras que Gustavo Petro apenas llegó a 558.514. De esos totales, 693 mil votos de Duque fueron en Medellín, triplicando los 208 mil de Petro.
¿Quiénes “invitaron” a Miguel Uribe en Medellín?

Y eso muy seguramente fue lo que hizo obligatorio el acto de Miguel Uribe en Medellín, para lo cual, inteligentemente, se vino de carriel al hombro y siempre resaltó en su discurso que nació en Bogotá, pero pertenece a “estas montañas”.
Además, muy vivo y “marcando territorio” en la tierra de sus ancestros, “se dejó invitar” por el sector de la “Tendencia Uribista” (es decir Ricardo Wolf y sus muchachos), sumado a la valenciocracia (Fabio Valencia y sus muchachos) y el “Quinterismo” (el quinterismo bueno) es decir Esteban Quintero y sus muchachos.
Y, además, los “puso a competir” entre ellos para saber quién llevaba más electores y le mostraba más fuerza, cada “sector” tenía tarjetas de invitación de un color diferente y también manillas de un color diferente, que al ser escaneadas mostraban “quién era de quién” …

Y así, con tres grupos fuertes del Centro Democrático en Antioquia Miguel Uribe en Medellín fue “lleno total”. Muchos jóvenes, todos los “viejos” seguidores de Álvaro Uribe, concejales de todo el departamento y…Manuel Santiago Mejía, el empresario que siempre sabe dónde “poner los huevos” (aunque no tiene problema en tener dos o tres nidos).

Además, a todos esos asistentes, se suma un malestar general entre todos los demás candidatos que se preguntan ¿De dónde apareció la gente? y ¿la plata para un acto tan grande?
Eso porque los otros 4 precandidatos se han dedicado a hacer una campaña “suave” con visitas a fábricas, comercios, salones sociales y parques de los barrios, es decir una campaña donde no invierten ni en sonido, menos en manillas o boletas, tampoco en logística de tarimas o sillas, ni de riesgos en alquiler de espacios grandes y ni un centavo en el muy necesario, y ya conocido, “sanduchito y juguito” para los que oyen los discursos.
¿Cuánto vale un acto político en Plaza Mayor?

Lo contrario de Miguel Uribe en Medellín donde alquiló el Pabellón Verde de Plaza Mayor (costo cercano a los 15 millones de pesos) más la logística de seguridad y control de los asistentes, sonido, tarima, serpentinas, afiches y volantes (…y el sanduchito). En total, señalan, un costo cercano a los 100 millones de pesos que habrían sido pagados por su papá, el antioqueño Miguel Uribe Londoño, esposo de Diana Turbay, la periodista asesinada por los extraditables en Copacabana, el 25 de enero de 1991.
Y los contrastes son evidentes. Mientras Miguel Uribe en Medellín llenaba Plaza Mayor, María Fernanda Cabal visitaba ese mismo día el barrio Manrique, dos parques en esa comuna y una curtimbre. Un “mano a mano con el elector” que también es válido, aunque la foto que más llama la atención es la donde se ve bastante gente y eso, hasta el momento, no lo muestran los demás precandidatos.
Y eso es lo que tiene al Centro Democrático ardiendo por dentro y a los otros precandidatos hablando de “desigualdad” y preguntado, ¿de dónde saca tanta plata Miguel Uribe?
¿Habrá un segundo Miguel Uribe en Medellín o habrá un “primero” de los otros precandidatos en la capital paisa?…Al fin y al cabo son cerca de dos millones de votos en Antioquia que le alegran el “caminado” a cualquier candidato. (Fotografías de ZALO y Andrés Juan Giraldo Vargas – www.rutanoticias.co).
