Los propietarios del Continental Towers se pararon en la Vía a Las Palmas y vieron como en solo tres segundos sus apartamentos se fueron al piso y ahí empezó otra parte de la tragedia de los acompaña desde que fueron obligados a salir de sus residencia en el año 2013.
Ahora, tras la implosión, la venta del lote podría darles un respiro económico a los propietarios del Continental Towers, pero parece más una burla que una “reparación” económica.
Esto porque hoy los propietarios calculan, suman y restan y las cifras son pobres, para ellos.
A la inversión inicial de 300 millones de pesos, se suman los pagos anticipados a los bancos (que fueron obligatorios), más los pagos a los abogados que llevan las demandas y el pago de impuestos municipales, por lo que la cifra podría llegar a los 600 millones de pesos.
La venta del lote, según calculan, podría aportar cerca de 10 mil millones de pesos, de los cuales la Alcaldía reclamará 5 mil millones de pesos por la implosión del edificio esta mañana de jueves.
Eso deja unos 5 mil millones de pesos ( $ 5.000.000.000) para todos los deudores.
El problema es que son tantos (familias propietarias, la familia Villegas que aún tenía apartamentos sin vender en las tres torres, los bancos y el municipio de Medellín), que vuelven muy pequeña la cifra.
Cada una de las familias afectadas, recibiría, según su propio cálculo y en promedio, unos 60 millones de pesos.
Es decir, los propietarios del Continental Towers recibirían el 20 por ciento de la inversión inicial.
Y solo podrían recuperar el resto si ganan la demanda instaurada contra el Municipio de Medellín, pero en Colombia la justicia es lenta, muy lenta.
Lo explica Elkin Hernández, propietario de un apartamento en el edificio Continental Towers: